Así de simple hermano. Respirar el aire fresco y oxigenado del Parque Terepaima. El complejo sentimiento de estar vivo. Lo tibio del sol después de una noche fría.
Cierto que ya no escuchamos el canto de los pájaros pero de pronto los vemos que están allí revoloteando cantando la importancia de vivir.
Mueven sus alas con la velocidad de un helicóptero y el sigilo de un zancudo.
O espera alebosa como la araña a que salte el Grillo.
¿Quién puede asegurar que no está flotando si no ve la tela? ¿ Quién puede saber que espera?
Quizá ella también está cantando en una frecuencia inaudible para el Ser Humano pero que para el grillo es un canto de sirena, el arpa de una musa que le incita a mecer su sueño sobre la tela.